Otra de las posibilidades contempladas es el uso de un reactor nuclear que alimente a un propulsor iónico (Nuclear Electric Xenon Ion System o NEXIS). También se ha propuesto el uso de RTG como fuente para un cohete de radioisótopos. El cohete termonuclear, por ejemplo, utiliza hidrógeno recalentado en un reactor nuclear de alta temperatura, consiguiendo empujes al menos dos veces superiores a los cohetes químicos.
